skip to main | skip to sidebar

SOLO DIOS BASTA

Como sacerdote, con este blog deseo compartir reflexiones acerca de la fe católica, la teología, la pastoral y temas relacionados. Se titula con la frase famosa de Santa Teresa que tiene más aplicación en nuestro mundo de hoy que nunca. As a priest I wish to share reflections on matters relating to the Catholic faith, theology, and related areas inspired by the famous words of St. Teresa of Avila: ONLY GOD IS SUFFICIENT.

sábado, 26 de diciembre de 2020

LA SAGRADA FAMILIA

 HOMILÍA FIESTA DE LA SAGRADA FAMILIA, 27 DE DICIEMBRE DE 2020. 

¿Qué es lo que hace que sea una familia santa o sagrada? La palabra significa ser consagrado a Dios. Ya en el Libro del Levítico Dios dice: Sed santos como yo  el Señor tu Dios es santo. Veamos, pues cómo esto se realiza en el caso de la Sagrada Familia. 

En primer lugar, vemos que San Mateo afirma que José era un hombre justo. Esto significa santo, dedicado a cumplir en todo momento la ley de Dios. Primero, José descubre que María está en cinta. Se le ocurre que pudiera ser víctima de una violación. No es que haya pensado que María no haya sido virtuosa y fiel, pero en la cultura de entonces, eso la dejaría muy mal y  no se podría proceder con el casamiento programado. Obviamente, eso le provocaba mucha angustia y había decidido separarse de manera privada. Las lenguas del pueblo habría supuesto que María era culpable de adulterio lo cual tenía la pena de apedreamiento como vemos en el episodio del Evangelio de San Juan de la mujer pillada en adulterio fragrante. En este momento, José tiene un sueño en el que le habla un ángel que le manda no tener miedo (mensaje que Dio siempre comunica a los que ha escogido para una misión especial o profética). El ángel le dice que acoja a María porque el niño que lleva ha sido concebido por obra del Espíritu Santo. Este ese el primer episodio que el Evangelio nos presenta a José como hombre justo o santo. 

Luego después del viaje a Belén, el nacimiento de Jesús en una gruta, y obviamente la preocupación que un nacimiento así provocaba en medio de un viaje a donde suponemos no se encontraban familiares o amigos que pudieran ayudarles, viene la orden de Herodes de matar a los niños de dos años o menos debido a la venida de los Magos para encontrar al Rey de los Judíos. Similar a su antecesor José en el Libro del Génesis, recibe otro mensaje del ángel a través de un sueño que lo manda levantarse y tomar al niño y su madre a Egipto. Recordemos cómo el Patriarca fue vendido como esclavo por sus hermanos y llevado a Egipto. Acabó como esclavo y mayordomo de la casa de Pútifar, pero la esposa de ésta quiso seducirlo, pero rechazó sus avances y ella lo acusó de haber hecho lo mismo que ella había intentado de manera que José acabó en la cárcel. De ahí fue liberado llegando a ser mayordomo del Faraón gracias a su capacidad de interpretar el sueño del Faraón, pues ya en la casa de su padre solía tener sueños, cosa que provocó la envida de sus hermanos. Así, pues por caminos providenciales tanto Jesús como el pueblo de Israel llegaron a Egipto. Además, no pudieron

Luego, cuando el niño tenía doce años, estando en Jerusalén para la fiesta de la Pascua, Jesús se quedó en Jerusalén, pensando José y María que estaba con unos familiares en el viaje de regreso. no volver a Belén porque el hijo de Herodes gobernaba allí y también era malo. Regresaron, pues a Nazaret. Después de tres días de angustia lo encontraron en el Templo discutiendo con los escribas. Cuando María le preguntó por qué había hecho eso, Jesús le dio la respuesta desconcertante ¿No sabíais que tenía que hacer en los asuntos de mi Padre?

Las pruebas y dificultades ya se ven en el caso Abrahán y la respuesta a los planes  incomprensibles de Dios cuando su hijo Isaac concebido milagrosamente cuando él y su esposa Sara eran ya ancianos, siendo él el hijo de la promesa, pues Dios prometió a Abrahán una prole tan numerosa como las estrellas del cielo o la arena del mar. Resulta que luego le manda sacrificar a su hijo Isaac, y se dispone a cumplir el mandato de Dios cuando un ángel intervino para pararlo en el último momento. 

De estos y otros episodios de la Biblia, descubrimos que el camino de la santidad consiste en el cumplimiento de la voluntad de Dios. Esta es la condición para que una familia sea santa. Con frecuencia los padres tienen planes para sus hijos e hijas, y resulta que uno de ellos se siente llamado a seguir a Jesucristo en la vocación al sacerdocio o la vida religiosa. A mí me contó una religiosa en Perú que el principal obstáculo para las vocaciones a su congregación es la oposición de los padres que no quieren aceptar que Dios esté llamando a su hija a servirle en la vida a religiosa.  Esos padres no están dando la medida de generosidad y entrega al camino de Dios, como vemos en el caso de San José y María Santísimo y Abrahán. 

Publicado por Thomas J. Hennigan en 3:24 No hay comentarios:

sábado, 19 de diciembre de 2020

EL SEÑOR ESTÁ CERCA.

 HOMILÍA PARA EL IV DOMINGO DE ADVIENTO, CICLO II, 20 DE DICIEMBRE DE 2020

Hemos llegado casi al final del tiempo de Adviento. La liturgia lo divide en dos períodos, desde el primer domingo hasta el 17 de diciembre o la última semana. Como hemos observado, Adviento significa llegada o venida, pero se trata de una preparación para tres venidas. La primera es la venida del Señor que nació en Belén de la Sma. Virgen María y se cumplen las muchas profecías que encontramos en la Biblia y de manera especial en el Libro de Isaías. Luego nuestra liturgia nos presenta la segunda venida de Jesús como Rey y Juez de vivos y muertos al final de los tiempos. Así como el resto fiel de Israel esperaba con ansia la primera venida en la carne, así nosotros tenemos que disponernos a esperar con alegría la segunda venido vigilando y orando, también nos corresponde disponernos a celebrar la venida que se va a realizar este año con la celebración del nacimiento de Jesús en Belén. La liturgia nos presenta una mera memoria, un mero cumpleaños como solemos celebrar nosotros, sino una actualización de los misterios, pues Dios no está restringido en el tiempo y todas celebraciones litúrgicas nos hacen presente esta venida de Jesús en Belén para que nos dispongamos a acoger las gracias que nos ofrece aquí y ahora este año en nuestra peregrinación hasta la meta definitiva del encuentro con el Señor en el cielo. 

La celebraciones tradicionales, como la corona de Adviento en la que hoy encendemos la cuarto vela, que simboliza el aumento de de luz que representa a Jesucristo, luz de l mundo, Sol de Justicia que los pastores vieron en Belén acompañadas por el canto de los ángeles. Los días de Adviento han sido días de espera y alegría con la seguridad de que el Señor viene que quiere que nos dispongamos para acogerlo en nuestros corazones. Los aspectos externos, tradicionales como el Belén en las Iglesias y en las casas, las estrellas y demás aspectos tradicionales como el canto de los villancicos etc.  que se manifiestan en la Navidad también nos han de ayudar a llenarnos de alegría y de esperanza. El mundo secular ha reducido la Navidad a un celebración familiar y para los niños. El Adviento también ha sido un tiempo de oración y penitencia. Se nos invita al encuentro de Jesús en la confesión para disponernos más a acoger a Jesús en nuestro corazón. 

Este año ha sido en muchos aspectos un año horrible para millones de personas de manera que ha habido un gran aumento de hambre en el mundo, muchos sufrimientos impuestos a todas las personas, incluso a las personas sanas con la excusa del "virus". Muchos de nuestros ancianos han fallecido debido a esta enfermedad y las medidas draconianas impuestas por los gobiernos con una gran dosis de hipocresía. Nos han impuestos tales medidas, mientras ellos no se han sometido a ellas. Ha prevalecido la mentira y la manipulación, la privación de la libertad y derechos fundamentales. Se ha ido estableciendo una dictadura en todos los países, mientras han ido facilitando los abortos, en España con extrema hipocresía están imponiendo una ley de eutanasia, o como se decía antes "matanza por misericordia", falsa misericordia. La gente es sumamente manipulable con el miedo. En algunos países han cerrado las Iglesias, hasta prohibido el canto en las Iglesias o de los villancicos en la calle, El remedio ha sido muchísimo peor que el mal. No permitamos que nos priven de la celebración de la Navidad, pues Dios siempre nos da abundancia de su gracia en la ocasión de la celebración de las grandes fiestas de la Iglesia, pues los mismo ángeles no pudieron dejar de cantar en Belén.

Hoy hemos escuchado el Evangelio de la Anunciación del Arcángel Gabriel de la gran noticia de la llegada del Mesías, Hijo de Dios, Salvador, esperado por el Pueblo de Israel a lo largo de los tiempos y pregonado por los profetas.  El ángel saluda a María con las palabras "Dios de salve, llena de gracia. El Señor está contigo", palabras recogidas el Ave María, una de las oraciones más repetidas de todas sobre todo en el Santo Rosario. Este saludo es mucho más que un saludo de cortesía. "Dios de salve", solo Dios nos puede salvar y en ese momento central de la historia su Hijo va a hacerse hombre en el seno de María. A ella le tocó escuchar el mensaje más grande y extraordinaria de toda la historia. San Pablo habla de la plenitud de los tiempos. 

El ángel procede, "llena de gracia". La palabra gracia, ha llegado a ser una de las palabras más llenas de sentido de la teología y fundamento del hecho de que María fue concebido sin pecado original. Se trata del plan de Dios de hacernos partícipes de la naturaleza divina y en primer lugar María que cuenta con más gracia y bendición de Dios que cualquier otra criatura. Se trata del anuncio del nacimiento de Jesús con el que se cumple la promesa hecha a David, en la primera lectura. Sin embargo, el que va a nacer no va a ser solamente hijo de David, sino Hijo de Dios y su concepción se da por obra del Espíritu Santo. No es de extrañar, pues, que María con toda su humildad, hace la pregunta sobre cómo se iba a cumplir esa gran promesa. Una vez asegurada de que eso es lo que Dios quería, ella responde con la bien conocida expresión "Aquí está la esclava del Señor. Hágase a mí según tu palabra". Como decían los Santos Padres "la obediencia de María desató el nudo hecho por Eva", pues ya en el siglo II María fue denominada la Nueva Eva, según podemos recoger de los escritos de San Justino y San Ireneo.

Aunque estamos padeciendo dolores o sufrimientos por los motivos que sean, no dejemos pasar esta Navidad sin recoger las gracias que el Señor nos tiene preparadas y nos quiere regalar. Esta generosidad de Dios está dirigida a todos y la hemos de compartir con los más posibles. Procuremos que ninguno a nuestro alrededor pierda esta ocasión de compartir esta gran alegría que el ánngel anuncó a los pasores en la noche de Belén. Dentro de nuestras posibildidades, no dejemos de ofrecer algo a Caritas para que alivie a los más necesitados que son mucho más este año. No dejemos de consolar a los afligidos, a los que han perdido seres queridos a lo largo de este año complicado que hemos vivido. Dios se ha hecho hombre hace dos mil años en Belén, pero su presencia en nuestro mundo no terminó con sus 33 años vividos en Tierra Santa, sino se extiende a través de la Iglesia, su Cuerpo. de manera especial a través de la Eucaristía, y de cada uno de nosotros que estamos llamados a reconocerlo en los más "pequeños" o necesitados. 


Publicado por Thomas J. Hennigan en 2:07 No hay comentarios:

sábado, 12 de diciembre de 2020

DOMINGO DE ALEGRÍA

HOMILÍA DEL TERCER DOMINGO DE ADVIENTO, CICLO II, 13 DE DICIEMBRE DE 2020. 

Tradicionalmente, este domingo se ha llamado "Domingo de Alegría". Por ello, me voy a fijar en este tema que se basa en nuestra segunda lectura de hoy tomada de la Carta de San Pablo a los Tesalonicenses 5,16 a 24. El pasaje consiste en una serie de frases breves empezando con la exhortación: Estad siempre alegres. El tema de la alegría es recurrente a lo largo del Antiguo Testamento, En primer lugar están las alegrías de la vida. Cosas como el amor entre marido y mujer, la posibilidad de olvidar sus dolores y sufrimientos, según el archipesimista  Qoholet. Las grandes fiestas son ocasiones de compartir la alegría incluyendo  el vino consumido con moderación en las grandes fiestas. También la buena salud trae consigo la alegría como una buena palabra, aunque Dios rechaza las alegrías de los malvados. El culto comunitario provoca alegría al celebrar la Alianza de Dios con su pueblo. Fiestas como la Pascua y la vendimia son ocasiones de compartir la alegría. También la fidelidad a la Palabra de Dios provoca alegría en el corazón. La esperanza de la llegada del Mesías provoca alegría y se expresa en los cantos y salmos. 

En el Nuevo Testamento, no falta gran alegría como en el caso del encuentro de María con su prima Isabel, expresada en el Magníficat. El nacimiento de Jesús es una ocasión de gran alegría que se manifiesta de manera especial con la aparición del coro de los ángeles cantando "Gloria a Dios en el cielo y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad". El reino de Dios ya está presente en Jesús. Él es el Esposo  y mientras está presente, los discípulos no están obligados a ayunar. Los milagros provocan alegría, pues son anticipación de la victoria de Jesús sobre el mal y la muerte. Los ángeles del cielo se alegran sobre la conversión de un pecador, Constatamos en los Hechos de los Apóstoles la alegría que provoca la conversión en el bautismo que es la vida nueva. El amor de Jesús provoca una gran alegría. La gran fuente de alegría para los discípulos es el encuentro con Jesús resucitado y así es para nosotros sobre todo en el Domingo de Pascua cuando tradicionalmente los cristianos se saludan con Jesucristo ha resucitado y se contesta Verdaderamente Cristo ha resucitado. San Pablo nos invita y exhorta a la alegría no solo en nuestra lectura de hoy sino en otros muchos lugares. Insiste en estar siempre alegres,  pero ¿cómo podemos estar siempre alegres? Incluso dice en otro lugar regocijo en mis tribulaciones. Esto lo puede decir porque tiene la plena certeza de la victoria de Jesucristo y que los sufrimientos de esta vida se terminan y llegaremos a gozar de la presencia de Dios, de Jesucristo, de los ángeles y santos en el cielo. 

El Apóstol prosigue: Orad en todo momento. En la antigüedad los cristianos tomaban en serio esta exhortación y los Padres del Desierto en el siglo IV procuraban aplicarla al pie de la letra. Ellos se dedicaban a unas labores repetitivas, como hacer canastas, que dejaban la mente lista para elevar la mente y el corazón a Dios. Grandes teólogos como Orígenes y San Agustín afirmaban que este mandato se cumple dedicando toda nuestra vida y actividad al cumplimiento de la voluntad de Dios. La unión con Dios y el cumplimiento de su voluntad son fuentes de alegría también.

Dad gracias a Dios, pues esta es la voluntad de Dios respecto a vosotros como cristianos. La acción de gracias es un aspecto importante de la oración. Constatamos que Jesús, dio gracias a Dios al multiplicar los panes y peces y en la Última Cena, pues se trataba de una costumbre muy arraigada entre los judíos. Eran conscientes de que los alimentos eran un don de Dios, lo mismo la alegría de la fiesta que compartían. La misma Eucaristía es acción de gracias. No olvidemos, pues de dar gracias a Dios al dar inicio a nuestra cena de Navidad. Jesús se quejó de los licorosos que curó que no regresaron para dar gracias a Dios. 

En nuestro mundo actual, parece que estaría prohibido la alegría y el gozo cuando en la Biblia es un tema fundamental a lo largo de toda ella. Ahora, con las restricciones del coronavirus han prohibido hasta el canto. Todas las medidas absurdas que no están imponiendo  se basan en el miedo que todo el día los medios de comunicación están propagando. Tales medidas no tienen fundamento médico ni científico y sirven para imponer un control dictatorial a la población. Son inhumanos. He sabido que en Bélgica han mandado a la Policía a controlar cuántas personas hay en la cena de Navidad. Resulta que hay menos muertos por cualquier causa en los países incluyendo España este año que los años anteriores y que hay más probabilidad de morir de un accidente de tráfico al ir y volver del trabajo que morir de coronavirus. Además, ¿cómo es posible que ya no haya muertos por la gripe estacional, que ocurre cada año sobre todo en el caso de los ancianos.  Dios nos quiere libres, nos quiere alegres y capaces de compartir la Navidad con nuestros seres queridos y también contribuyendo para que los más necesitados puedan celebrar la fiesta porque es más dichoso dar que recibir un dicho del mismo Jesús. No dejemos que los aguafiestas nos priven de la gran celebración del Nacimiento de Jesucristo Nuestro Señor en Belén. ¿Cómo sería el mundo si no hubiera venido a enseñarnos a gozar de las cosas grandes que Dios ha hecho a favor de todos nosotros, 



Publicado por Thomas J. Hennigan en 2:53 No hay comentarios:

sábado, 5 de diciembre de 2020

CONFIANZA EN LA PROMESA DEL SEÑOR

 HOMILÍA, SEGUNDO DOMINGO DE ADVIENTO, 6 DE DICIEMBRE DE 2020. 

Como sabemos, el Adviento es un tiempo de esperanza y alegría recordando la larga espera del pueblo de Israel a lo largo de los siglos para la venida del Señor, la esperanza ya cercana de María Santísima y San José a lo largo de los meses antes del nacimiento del Niño Jesús, y por ende nuestra doble esperanza para el cumplimiento de las promesas del Señor sobre la segunda venida gloriosa cuando se manifestará el triunfo de Dios sobre el mal, la muerte, u por ende, nuestra celebración de la Navidad de este año que ha de ser un adelante de la alegría de este triunfo. Me voy a fijar tanto en la primera lectura del Libro de Isaías y la segunda de la Segunda Carta de San Pedro, con la esperanza que nos llenen de confianza en el cumplimiento de las promesas del Señor. 

Nuestra primera lectura de hoy es el inicio de la segunda parte del libro de Isaías y proviene de otro profeta de nombre desconocido que los estudiosos de la Biblia suelen llamar Deutero Isaías o Segundo Isaías. El gran profeta Isaías visión en el siglo VIII durante la hegemonía del Imperio de Asirio, cuya capital se encontraba en Nínive que se encuentra en lo que es ahora Irak, mientras este profeta vivió en el exilio que se dio entre los años 587 y 538 a. C. Esta última fecha corresponde a la conquista de Babilonia, que había conquistado Jerusalén, destruido la ciudad y el Templo y llevado miles de los habitantes, sobre todo las personas más importantes e influyentes como exilios a Babilonia. La caída del imperio de los caldeos con su capital en Babilonia se dio de la mano del Rey Ciro de los Persas, lo que es más o menos hoy en día Irán.  Ya antes de la destrucción de Jerusalén y del Templo, Dios, a través del Profeta Jeremías había previsto un largo periodo de exilio, pero también la vuelta del los exilios a su tierra. Se trataba del castigo de Dios de parte de los reyes, sacerdotes y falso profetas. Era el desastre más grande sufrido por el Pueblo de Israel, pues expulsados de su tierra y destruida la nación, resultó ser una prueba enorme que no lograban entender. Sin embargo, Dios les envió este nuevo profeta con un mensaje de esperanza. Hoy nos toca reflexionar sobre los primeros versículos de su libro que va desde el capítulo 40 a 55 del Libro de Isaías. Comienza con la invitación alentadora: "Consolad, consolad a mi pueblo, dice vuestro Dios; hablad al corazón de Jerusalén, gritadle: que se ha cumplido su servicio, y está pagado su crimen, pues de la mano del Señor ha recibido doble paga por sus pecados". 

Dios libera a su pueblo. Babilonia está bastante lejos de Jerusalén y Dios invita a la gente a preparar un camino: En el desierto preparadle un camino al Señor; allanad en la estepa una calzada para nuestro Dios; que los valles se levanten, que los montes y colinas se abajen, que lo torcido se enderece y lo escabroso se iguale. Se revelará la gloria del Señor. Podemos ver este camino no tanto como un camino físico por el desierto, sino como un camino interior dentro del alma de cada uno para disponernos a  acoger al Señor que viene de nuevo en esta Navidad. Constatamos el gran gozo y alegría que las palabras del profeta expresan. En nuestro mundo actual, con tanto mal que constatamos, más que otros años en este año con todos los líos provocados por la supuesta pandemia y las acciones de los gobernantes del mundo entero que actúan más bien como hijos de Satanás. Estando en una época de grandes avances en la ciencia, no han sido capaces de proporcionar un verdadero remedio para este mal que han llamado Cov 19. Han impuesto un régimen de confinamiento de toda la población, pues en ningún caso en la historia se ha confinado a los sanos. Tanto aquí en España como en otros países, mientras los políticos mandaron prohibir que más de 6 personas pudieran comer en un restaurante, ellos mismos han participado en banquetes de más de 100 personas, o mientras prohibieron los viajes, ellos han ido de vacaciones etc. No es de extrañar, pues que cuando los reyes y otros gobernantes de Israel, Dios los haya castigado. Ahora, el profeta indica que ya han cumplido el castigo y podrán volver a Jerusalén. Recordemos que "Dios es comprensivo y misericordia, lento a la ira y rico en piedad". 

Pasemos ahora a nuestra segunda lectura donde San Pedro nos recuerda: El Señor no tarda en cumplir su promesa, como creen algunos. Lo que ocurre es que tiene mucha paciencia con vosotros, porque no quiere que nadie perezca, sino que todos se conviertan. El día del Señor llegará como un ladrón.Com o también Jesús había profetizado los grandes acontemimientos que van a acompañar "el día del Señor" o la segunda venida del Señor, que será preceido por terremotos, guerras y otras catástrofes, San Pedro hace referencia a lo que se va a producir en aquel momento. Sin embargo, nos exhorta a esperar con paciencia la llegada de los cielos nuevos y la tierra nueva, y que el Señor nos encuentre en paz, inmaculados e irreprochables. ¿Y cómo podemos alcanzar la paz, la confianza en la presencia del Señor y que nada nos turbe, como decía Santa Teresa de Jesús: Nada de turbe, nada. Nada te espante. Todo se pasa. Dios no se muda. La paciencia todo lo alcanza. Quien a Dios tiene, nada le falta. Solo Dios basta. Eleva el pensamiento, al cielo sube,por nada te acongojes, Nada te turbe.A Jesucristo siguec on pecho grande, y, venga lo que venga,Nada te espante.¿Ves la gloria del mundo? Es gloria vana; nada tiene de estable, Todo se pasa.Aspira a lo celeste,que siempre dura; fiel y rico en promesas,Dios no se muda. Ámala cual merece Bondad inmensa;pero no hay amor fino Sin la paciencia. Confianza y fe viva mantenga el alma, que quien cree y espera. Todo lo alcanza. Del infierno acosado aunque se viere, burlará sus furores. Quien a Dios tiene.Vénganle desamparos, cruces, desgracias; siendo Dios su tesoro, Nada le falta.. Id, pues, bienes del mundo;id, dichas vanas,aunque todo lo pierda. Sólo Dios basta.

¿Qué podemos hacer, pues para disponernos de la mejor manera para acoger de nuevo  y con mayor esperanza y amor  en esta Navidad?  Para muchos este año 2020 ha sido muy duro, algunos de los ancianos acogidos en residencias  han muerto por falta de cuidado, sus familias no han podido siquiera participan en sus exequias etc. Otros han perdido su puesto de trabajo o sus negocios han quebrado o van a quebrar, otro se han enfermado por otros males y no han sido atendidos debidamente y un largo etcetera. Recordemos lo que decía el Profeta Jeremías "Maldito el hombre que pone su confianza en el hombre"  (17,5), queriendo decir que el único que merece nuestra plena confianza es el Señor. Y San Pedro escribía en nustra primera lectura de hoy: "No perdáis de vista una cosa: para el Señor un día es como mil años y mil años como  un día. Él es el único que merece nuestra confianza". 




Publicado por Thomas J. Hennigan en 4:03 No hay comentarios:

sábado, 28 de noviembre de 2020

ADVIENTO: LA MANIFESTACIÓN DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO.

 HOMILÍA DEL PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO, 29 DE NOVIEMRBE DE 2020.

¿Qué significa Adviento? Etimólogicamente significa llegada o venida. En griego se dice parusía, aunque nosotros utilizamos esta palabra en referencia a la segunda venida de Nuestro Señor para juzgar a los vivos y muerto e dr inicio  a la etapa definitiva a la que nos invita, la vida eterna. Nuestro celebración litúrgica del Adviento, con la que también damos inicio al nuevo año litúrgica no invita a tener en cuenta tres venidas. En primer lugar, la venida de Jesucristo con su nacimiento de la Sma. Virgen María en Belén, esperada a lo largo de los siglos por los profetas, hombre y mujeres santos y devotos de Israel, como Simeónn y Ana a quienes María y San José encontraron en el templo. Por lo tanto, el Adviento es tiempo de espera y por ende de esperanza del cumplimiento de las promesas del Señor a lo largo del Antiguo Testamento. En segundo lugar se trata de nuestra espera de la segunda venida al final de los tiempos que conviene que en medio de las visicitudes de nuestra vida, no conviene que nos olvidemos de esa meta y que no perdamos la convicción de que el Señor ciertamente cumplirá todas sus  promesas. En tercer lugar, se trata de dispondernos para la celebración del Misterio de la Encarnación del Hijo de Dios y su nacimiento que no es un mero recuerdo de algo que se dio hace dos mil años, sino un misterio, o una acción maravillosa de Dios que se actualiza a través de la liturgia de la Iglesia. como que vuelve a venir Jesús a nuestra alma y se hace presente en nuestro tiempo y en nuestra vida la gracia que manifestó en aquella primera venida en Belén. Por lo tanto, en el Adviento se nos presenta la figura de San Juan Bautista como el úlitmo de los grandes profetas que prepararon el camino para la vendida de Jesús por su predicación de penitencia en el desierto. Igualmente,la Sma. Virgen María tiene una gran importancia en nuestro Adviento, pues ella más que cualquier otro nos enseña a abrir nuestra mente y nuestro corazón para esta nueva venida de Jesús este año. 

Además. de ser un período de esperanza y por tanto de alegría al celebrar la venida del Señor, es un tiempo de penitencia con semejanzas a la Cuaresma, aunque la Cuaresma se vive en la Iglesia con mayor conciencia de la importancia de la conversión y la penitencia. El Adviento se introdujo a la liturgia alrededor del siglo VII precisamente como una vivencia semejante a la Cuaresma e incluso en aquella época era de 40 días, empezando con la Fiesta de San Martín que es el 11 de noviembre. Por lo tanto, nos conviene mantener este aspecto no perdiéndolo en medio de las preparaciones que se suele hace en lo que podemos llamar "La Navidad comercial". 

Nuestra primera lectura del c. 62 del libro de Isaías, libro que se lee mucho en estos días de Adviento, nos invita a no extraviarnos y no "enduerecer el corazón". Refleja esta invitación el salmo 94 cuando dice "Ojalá hoy no endurezcáis vuestro corazón como en Meribá como el día de Masá en el desierto.  El corazón en la Biblia, como sabemos, es el centro de nuestro ser, algo así como la conciencia. Hoy en día al hablar del corazón, no como un mero músculo, nos referimos a las emociones. Esto no lo excluye la Biblia, sino que incluye los pensamientos más íntimos y la conciencia. ¿Y aquello de endurecer el corazón"? Se trata de la no acogida de las invitaciones de Dios, con la imagen de la dureza como sucede cuando la tierra se hace dura y no es capaz de recibir la semilla ni dar fruto. Además, si el Adviento es tiempo de espera, de estar atentos esperando la venida del Señor como nos indica nuestro evangelio de hoy¨Mirad, vigilad: pueus, no sabéis cuando es el momento". 

Prosigue el profeta diciendo: Nadie invocaba mi nombre ni se esforzaba por aferrarse a ti; pues nos ocultabas tu rostro y nos entregabas en poder de nuestra culpa. En la Biblia escuchar la voz, es decir la Palabra de Dios y buscar su rostro son actitudes fundamentales para cada miembro del Pueblo de Dios. Tenemos que hacer un gran esfuerzo para no olvidarnos del Señor y las maravillas que ha hecho por nosotros al darnos el don de la vida creándonos a imagen y semejanza suya. Luego, regalándonos la fe católica, su gracia que nos ha hecho hijos suyos en el Hijo, llegando a inhabitar en nuestro corazón como escribía San Pablo: El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazónes por el Espíritu Snto que se nos ha dado. Por lo tanto, en estos días de Adviento deberíamos poner más atención en la oración siguiendo el ejemplo de San Juan Bautista  con su oración ypenitencia en el desierto,  y de María Santísima cuya acititud se manifiesta en su Cántico el Magnificat. 

El profeta prosigue: Todos éramos impurso, nuestra justiica era un paño manchado, todos nos marchitàbamos como un follaje, nuestras culpas nos arretataban como el viento". Si realmente anhelamos la venida del Señor, en primer lugar, no nos olvidaremos de nuestras culpas y procuraremos disponer nuestro corazón para entre el él Jesús recién nacida. Una manera de hacer esto es examinar nuestra conciencia y confesar nuestro pecados, aunque por la gracia de Dios no hayamos cometido pecados graves, pero el que realmente ama, procura no ofender al amado y si no hace se arrepiente, hace un propósito de enmienda y así aumentará su amor al amado.  Deberíamos parecernos a una rama floreciente y no una hoja marchita que lleva el viendo por donde quiere. 

Por lo tanto, no dejemos pasar esta estación de Adviento sin acercarnos más al Señor a través de la oración, la penitencia, animando dentro de nosotros la esperanza de la venida nueva y más profundo de Jesús que se humilló y se hizo niño para salvarnos. Tengamos plena conciencia de la necesidad de la salvación. Los cristianos de los primeros siglos se imaginaban el bautismo como un rescate de un naufragio como estando en un barco que entró en una tormenta y nos dejó tirados en ell mar en peligro de muerte. Dios nos pasó una tabla a la que nos agarramos que es el bautismo y nos salvó del naufragio. 

Publicado por Thomas J. Hennigan en 3:02 No hay comentarios:

sábado, 21 de noviembre de 2020

JESUCRISTO REY DEL UNIVERSO, 34 DOMINGO DE TIEMPO ORDINARIO, 22 DE NOVIMEBRE 2020.

 Esta fiesta fue introducido a la liturgia en el años 1925, en una época del crecimiento de las dicaduras totalitarias como el Comunismo en Rusia y el Fascismo en Itala. La Iglesia en la persona del Papa Pío XI quiso señalar que hay un solo Rey y Señor del Universo y es Jesucristo Nuestro Señor. Recordemos como Jesús al final del Evangelio de San Mateo, desde una montaña en Galilea declaró "Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra. Id, pues a proclamar el Evangelio a todas las naciones, bautizandolas en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo". 

En el Antiguo Testamento, era común que el rey se denominara Pastor de su Pueblo. Así es en nuestra primera lectura de hoy del Profeta Ezequiel, Este profeta, uno de los más grandes e importantes del Antiguo Testamento era sacerdote del Templo de Jerusalén y le tocó salir al exilio entre los primeros deportados alrededor del año 600 a. C. De hecho, cumplió su misión profética en Babilonia y no en Israel. Aquí comunica el mensaje de Dios acerca de los malos profetas. Es cierto que el Rey de Babilonia, Naboduconor era responsable de la conquista de Jerusalen, del incendio del Templo y demás destrozos cometidos, pero el profeta reconoce que los reyes que debían de ser los pastores de Israel habían fallado, algunos de ellos incluso introduciendo a  dioses falsos paganos en el mismo templo. La culpa la compartían los oficiales del rey, los sacerdotes y los falsos profetas que profetizaban falsedades y la gente al hacerles caso, no cumplieron lo que Dios les pedía a través del profeta Jeremías. "Yo mismo apacentaré mis ovejas, yo mismo las haré sestear -oraáculo del Señor. Buscaré las ovejas perdidas, recogerá las descarriadas, vendaré a los heridos, curaré a los enfermos, a las gordas y fuertes las guardaré, y las apacentaré como es debido." Queda claro, que Yavhé por boca de Ezequiel se refiere a Jesús. En el Evangelio de Juan, se proclama El buen pastor que da la vida por las ovejas". Jesús predico la palabra de Dios, curó a los enfermos, les dio de comer multiplicando los panes, y luego en la Última Cena nos dio el verdadero pan de vida que nos alimenta para la vida eterna. Se entregó así mismo hasta el extremo de la muerte en cruz, resucitando luego para extender su misión, ya no solo a Israel, sino al mundo entero cuando fundó la Iglesia e envió a los apóstoles a proclamar la Buena Noticia, siendo él el Buen Pastor prometido en ya en el Antiguo Testamento. 

Jesús desde el inicio de su ministerio en Galilea, proclamaba el Reino o Reinado de Dios y fue explicando en qué consistía a través de las parábolas. Es más, según dice Orígnes, el más grande de los Padres de la Iglesia de Oriente, señala el el Reino es "autoreino", es decir, el mismo Jesucristo es el Reino de Dios ya establecida en el mundo con su predicación, sus milagros, su muerte y resurrección. Jesús funda la Iglesia pescisamente para llevar adelante su obra, pues la Iglesia es cuerpo y esposa de Jesucristo.  San Pablo nos da más detalles sobre el Reino de Jesucristo en nuestra segunda lectura tomada de la Primera Carta a los Corintios, Jesucristo con su resurrección es primicia o primer fruto de la obra de Dios."Cuando Cristo devuelva a Dios Padre su reino, una vez aniquilado todo principado, pofer y fuerza Cristo tiene que reinar hasta que Dios haga de sus enemigos estrado de sus pies. El úlitmo enemigo aniquilado será la muerte". Jesucristo es la cabeza y todo le será sometido. Esto forma parte dell plan maravillosa de Dios.

Es cierto que todavía no se cumple plenamente esta promesa de Dios expresada aquí por San Pablo. Hay mucho mal en el mundo e incluso cada uno de nosotros llevamos mal en nuestro corazón. Por algo empezamos la Santa Misa confesando que "hemos pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisión" .Nos corresponde colaborar con el plan de Dios de crear "cielos nuevos y tierra nueva". No olvidmeos lo que dice Jesús en el Apocalipsis: "haré nuevas todas las cosas". Eso incluye a cada uno de nosotros y este proceso empezó con nuestro bautismo, gracias al cual podemos y debemos "caminar en la novedad de vida" en palabras de San Pablo, o lo que es lo mismo, permitir que Jesucrito  reine en nuestro corazón. 

Pasemos a nuestro pasaje evangélico de hoy en el que vemos que Jesucristo Rey también es Juez de vivos y muertos". El reinado de Cristo exige nuestra colaboración. No basta decir "Señor, Señor" sino que es necesario cumplir la voluntad de Dios, y haciendo eso dejaremos una huella importante en el mundo, auque no la vamos a reconocer mientras vivimos en este mundo. Seguramente, estamos familiarizados con este pasaje. Jesús, habiendo reunido a todos, separa las ovejas de las cabras a su derecha y a su izquierda, y establece el criterio fundamental para la entrada en su Reino: "Tuve hambre y me diteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, fui forastero y me visitasteis, estuve desnudo y me vestisteis, enfermo y me visitaseis, en la cárcel y vinisteis a verme". 

En estos momentos en que los gobiernos de manera criminal con la excusa de un virus que ni siquiera se ha probado que existe ni han hecho invesitgaciones para descubrir qué está causando esta enfermedad, ha confinado a la gente e impuesto medidas draconianas sin fundamente cientifica alguna, dejando a millones de personas sin trabajo, otros con sus negocios en la quiebra, habrá múlitples ocasiones para colaborar en dar de comer a los hambrientos. Hay personas deprimidas, que sienten una gran soledad. Los hay ante la multidud de líos económicos y de otro tipo se les ocurre la idea de suicidaarse. Abramos nuestros ojos y démonos  cuenta de quienes son para de verdad Cristo reine en neustros corazones, pues aquí dice "cuantas veces los hicisteis a estos mis pequeños, a mí no hiciseis". No  basta la oración, que también tiene una gran importancia, Abramos los ojos y prestémonos sea a ayudar ahorrando dinero y entregándolo a Caritas, sea acercándonos a las personas que se sienten solas y agobiadas. Preguntémonos ¿qué haría Jescristo en esta situación, pues se identifica con cada persona que sufre?. 

 


Publicado por Thomas J. Hennigan en 2:55 No hay comentarios:

sábado, 14 de noviembre de 2020

EL JUICIO FINAL

HOMILÍA DOMINGO XXXII DE TIEMPO ORDINARIO, CICLO C, 15 DE NOVIEMBRE DE 2020

La liturgia en esta época del año nos invita a pensar en las verdades últimas, la muerte, el juicio final y la vida eterna. Hoy nos corresponde reflexionar sobre el juicio final en el conocido pasaje del Evangelio de San Mateo en el que Jesús nos entrega unas pautas sobre el juicio en la forma de la Parábola de los Talentos. También nos fjaremos en la segunda lectura de la Primera Carta de San Pablo a los Tesalonecenses que trata de la actitud que debemos tener ante tal aconocimiento que llama como también los profetas el día del Señor.

San Pablo en su predicación en esa ciudad habrá tocado este tema y de su segunda carta a aquellos cristianos podemos deducir que lo que les explicó la doctrina del juicio final y la segunda venida del señor, pero  tuvo que corregir ciertas ideas equivocadas que tenían. Les escribía que el que no trabaja, que no coma. Insiste en que la vuelta del Señor en su día se dará como la llegada de un ladrón en la noche. Es fácil deducir por qué Dios no quiso revelarnos nada sobre fechas o tiempos en los que se darán esos acontecimientos, pues lo que corresponde es que estemos atentos y vigilantes y no caer en la desidia y la despreocupación y dejemos de trabajar "con temor y tremblor" ante la posible llegada de aquel día en cualquier momento. El hecho el apóstol lo compara con los dolores de parto que llegan repentinamente a la madre gestante. También se trata de un dar a luz al mundo nuevo, a los nuevos cielos y la nuerta tierra. Prosigue: "vosotros, hermanos, no vivís en tinieblas, para que ese día os sorprenda como un ladrón. porque todos sois hijos de la luz, hijos del día;  no lo sois de la noche ni de las tinieblas. Esto se debe a que hemos sido injertados en Cristo por el bautismo y ya vivimos la vida nueva que llegará a  su plenitud a la vuelta del Señor. Lo que importa es que estemos vigilantes para no caer en la tentación y no dejarnos llevar por los vicos ni las atracciones de este mundo que es pasajero. Nuestra esperanza no es efímera sino en Cristo y se centra en la vida eterna. Seamos, pues,vigilante y no dormidos para que no nos coja ni el momento de nuestra muerte, ni la vuelta del Señor, si nos toca vivir ese gran día.ido

Pasemos a comentar la Parábola de los Talentos, El talento era una moneda de plata de bastante valor comparado con otras monedas que existían como el denario que correspondía la jornal del trabajdor. Debido a esta parábola solemos referir a las cualidades que poseemos como talentos. Uno tiene talento para la música, otro para algún deporte, otro para los negocios etc. En la parábola el Señor entrega un número diferente a cada uno y los deja en libertad sobre lo que quiren hacer con él. Hoy en día el tema de la igualdad es uno de los más discutidos y una de las palabras talismán en boca de bastantes políticos. Es evidente que no todos tenermos las mismas cualidades o talentos. Ese es el caso en la parábola. Obviamente, no se trata de acusar a Dios de ser discriminatorio porque no todos reciben la misma cantidad de talentos. El hombre está llamado a vivir en comunidad y cada uno a contribuir al bien común de todos de acuerdo con los talentos que ha recibido de Dios y cómo los ha utilizado a lo largo de su vida. 

Al final, llega el día del rendimiento de cuentas y los dos que han recibido más han trabajado bien y logrado una rentabilidad del doble de lo que han recibido y el Sr. los felicita y los invita a entrar a gozar de la recompensa en la casa del Padre. Le dio libertad y les dio la inteligencia y el deseo de trabajar para alcanzar una buena ganancia y agradar al Señor, Aquí también vemos la importancia del trabajo como parte esencial de la misión del hombre y la importancia de la colaboración del hombre en la realización del plan de Dios para el mundo. Este ya es un mandato de Dios dado a Adán incluso antes de caer en el pecado original. Algunos pudieran pensar que el trabajo es una carga pesada impuesta por Dios como castigo por el pecado, pero no, Iba a haber trabajo antes del pecado, pero obviamente, se hace más pesado como resultado del mismo, Es más, el trabajo nos hace capaces de colaborar con Dios a través de la creatividad y esto corresponde a nuestra dignidad de ser criaturas hechas a imagen y semejanza de Dios. Por eso, el paro que se extiende actualmente especialmente debido a la irresponsabilidad de los gobiernos que cerraron la economía dejando a millones de personas no solo en la angustia de no poder proveer por sus familias sino no alcanzar la dignidad que significa el trabajo, como explica muy bien San Juan Pablo II en su carta encíclica sobre el trabajo Laborem exercens. 

En cambio, el que recibió un talento no hizo nada para que fructificara y se merece la condena del Señor que justamente lo llama  negligente y holgazán .Es echado fuera a donde hay llanto y rechinar de dientes. Es decir, su vida ha sido un fracaso por no haber trabajado y hecho ningún bien con el talento que recibió. 

Así que, en nuestro caso, el juicio tendrá que ver también con lo que hicimos con los dondes o talentos que el Señor nos ha regalado. No queremos recibir la sentencia de ser negligentes y holgazanes, pongámnos a trabajar y hacer buen uso de nuestras cualidades, además de la práctica de la caridad que nos librará de caer en muchos vicios que nos puede llevar al infierno por irresponsabilidad y pereza, 

Publicado por Thomas J. Hennigan en 2:03 No hay comentarios:
Entradas más recientes Entradas antiguas Inicio
Suscribirse a: Comentarios (Atom)

Insignia identificativa de Facebook

Thomas Hennigan

Crea tu insignia

Seguidores

Archivo del blog

  • ▼  2022 (14)
    • ▼  abril (3)
      • EL APOCALIPSIS I
      • CRISTO HA MUERTO, CRISTO HA RESUCITADO, CRISTO VOL...
      • NO PEQUES MÁS
    • ►  marzo (3)
    • ►  febrero (4)
    • ►  enero (4)
  • ►  2021 (48)
    • ►  diciembre (3)
    • ►  noviembre (3)
    • ►  octubre (5)
    • ►  septiembre (4)
    • ►  agosto (3)
    • ►  julio (5)
    • ►  junio (4)
    • ►  mayo (5)
    • ►  abril (4)
    • ►  marzo (4)
    • ►  febrero (4)
    • ►  enero (4)
  • ►  2020 (47)
    • ►  diciembre (4)
    • ►  noviembre (4)
    • ►  octubre (5)
    • ►  septiembre (4)
    • ►  agosto (4)
    • ►  julio (4)
    • ►  junio (4)
    • ►  mayo (4)
    • ►  abril (5)
    • ►  marzo (3)
    • ►  febrero (5)
    • ►  enero (1)
  • ►  2019 (33)
    • ►  septiembre (1)
    • ►  agosto (3)
    • ►  julio (4)
    • ►  junio (4)
    • ►  mayo (5)
    • ►  abril (4)
    • ►  marzo (5)
    • ►  febrero (3)
    • ►  enero (4)
  • ►  2018 (45)
    • ►  diciembre (4)
    • ►  noviembre (4)
    • ►  octubre (4)
    • ►  septiembre (5)
    • ►  agosto (4)
    • ►  julio (4)
    • ►  junio (4)
    • ►  abril (3)
    • ►  marzo (5)
    • ►  febrero (4)
    • ►  enero (4)
  • ►  2017 (51)
    • ►  diciembre (5)
    • ►  noviembre (4)
    • ►  octubre (4)
    • ►  septiembre (5)
    • ►  agosto (4)
    • ►  julio (5)
    • ►  junio (4)
    • ►  mayo (3)
    • ►  abril (5)
    • ►  marzo (4)
    • ►  febrero (4)
    • ►  enero (4)
  • ►  2016 (57)
    • ►  diciembre (6)
    • ►  noviembre (5)
    • ►  octubre (4)
    • ►  septiembre (4)
    • ►  agosto (4)
    • ►  julio (5)
    • ►  junio (4)
    • ►  mayo (3)
    • ►  abril (7)
    • ►  marzo (8)
    • ►  febrero (6)
    • ►  enero (1)
  • ►  2015 (28)
    • ►  julio (1)
    • ►  junio (4)
    • ►  mayo (4)
    • ►  abril (4)
    • ►  marzo (5)
    • ►  febrero (10)
  • ►  2011 (3)
    • ►  marzo (3)
  • ►  2009 (23)
    • ►  junio (6)
    • ►  mayo (17)

Datos personales

Thomas J. Hennigan
Coto de Bornos, Cádis, Spain
Nacido en Irlanda. Ordenado sacerdote en Roma en 1981. He servido en Irlanda, Estados Unidos, España, Australia, Argentina y Chile. He trabajado en la formación en seminarios,en la docencia, en parroquias. Profesor de teología, latín, griego bíblico en el Seminario Mayor San Carlos y San Marcelo, Trujillo. Perú. Pertenezco a la Diócesis de Asidonia-Jérez en España. Born in Ireland. Ordained in Rome in 1981. I have worked in formation in seminaries, teaching theology, and in parishes.At present I teach theology,Latin, Biblical Greek, e historia del arte cristiano en el Seminario San Carlos y San Marcelo, Trujillo, Peru
Ver todo mi perfil